El presidente Jair Bolsonaro dijo el jueves que Brasil está negociando con Argentina para permitir la construcción de un gasoducto para traer gas de las reservas de Vaca Muerta, citando alternativas buscadas por el gobierno para reducir el valor del insumo.
“Estamos en negociaciones con Argentina. Gas de Vaca Muerta. Saldrá algún día, porque no es fácil empezar a importar gas, crear, construir ductos”, dijo Bolsonaro en su transmisión semanal en vivo en las redes sociales.
Existen conversaciones entre los dos países para la construcción del gasoducto, pero aún se busca financiamiento para el proyecto de miles de millones de dólares.
Sin embargo, creen que hay poco interés de los empresarios industriales de Porto Alegre y San Pablo, pese a que su costo de abastecimiento es cerca de 3 veces más caro que en Argentina.
“Está pendiente una misión a San Pablo, que se suspendió por el coronavirus. Queremos llevar a los productores como YPF, Pan American Energy (PAE), Total Austral y Compañía General de Combustibles (CGC), entre otros, para hacer una ronda de negocios con potenciales compradores del gas”, confiaron fuentes oficiales a El Cronista.
UNA IDEA QUE NO ES NUEVA
En septiembre de 2020, Argentina buscaba acelerar un acuerdo con Brasil para la construcción de un nuevo gasoducto desde la formación de Vaca Muerta hasta la capital de Río Grande de Sul, Porto Alegre, una megaobra de más de 1430 kilómetros que requerirá al menos una inversión de cerca de u$s 5000 millones.
El embajador argentino en Brasil, Daniel Scioli, había presentado detalles sobre el proyecto para incrementar las ventas de gas argentino al principal socio del Mercosur, en una iniciativa clave para la integración energética y para el cual Argentina propone la constitución de un “comité técnico de planeamiento bilateral”.
“Es nuestro gran proyecto binacional. Brasil precisa de gas y nosotros precisamos de mercados y de inversiones”, expuso Scioli en una entrevista con el diario brasileño Valor económico. Y consideró que una vez tomada la decisión de hacer el gasoducto, demandará unos 3 años para que esté operativo.
UN GASODUCTO DE CASI 1500 KM
La propuesta argentina apunta a la ampliar la capacidad de transporte del gas por un gasoducto entre la formación de Vaca Muerta, en la provincia de Neuquén, que recorrerá 1430 kilómetros hasta la frontera con Brasil a la altura de la ciudad de Paso de los Libres, en la provincia de Corrientes. Esa obra demandará inversiones de al menos u$s 3700 millones, para lo cual el gobierno argentino busca financiamiento, indicó el diario especializado
El tramo Uruguayana-Porto Alegre, en el estado de Río Grande de Sol, en tanto, demandará casi 600 kilómetros de extensión y se calcula de manera preliminar requerirá de inversiones en torno a u$s 1200 millones, que deberían ser responsaiblidad del gobierno brasileño, consignó Valor.
Argentina exporta en la actualidad unos 3 millones de metros cúbicos diarios de gas, aunque de manera inconstante, para proveer a la usina térmica de Uruguayana, principalmente en períodos de sequía y cuando las reservas de las centrales hidroeléctricas están en baja.
Con el nuevo gasoducto y la ampliación de capacidad de transporte de gas, Argentina quiere impulsar la utilización por parte de la industria brasileña de ese recurso generado en Vaca Muerta. En San Pablo, el costo final del gas natural está en u$s 11 por millón de BTU en San Pablo, pero podría llegar a Porto Alegre por un valor de u$s 7 por millón de BTU.
El beneficio de esta obra para la Argentina no solo estaría en la venta directa de gas, sino que con el acceso al gigante mercado brasileño, sería más fácil atraer inversiones para también incrementar la explotación de Vaca Muerta.
FUENTE: El Cronista