El grupo de los ExSecretarios de Energía de la Nación formado entre otros por Emilio Apud, Jorge Lapeña y Daniel Montamat presentó un documento por medio del cual expusieron un análisis del proyecto de ley de Promoción de las Inversiones Hidrocarburíferas impulsado por el gobierno y le pidieron a los integrantes del Congreso que lo rechacen.
En el documento difundido hoy, los exfuncionarios del gobierno plantearon que junto a una modificación de la actual Ley de Hidrocarburos, la propuesta “se trata de una ley de promoción industrial al sector de los hidrocarburos sin los debidos fundamentos y cuantificaciones respecto al alcance de la promoción; ni tampoco el costo que la misma tendría”.
Plantearon que “el proyecto otorga facultades a la autoridad de Aplicación de la Ley durante la promoción por 20 años para fijar entre otras cosas “precios de referencia o precios sostén” de forma discrecional, garantizando algunos volúmenes de exportación, la libre disponibilidad del 50% de las divisas generadas por esas exportaciones y desgravaciones impositivas que se definen en base a parámetros sobre los cuales el Estado ha demostrado escasa capacidad de control y auditoría”.
En el posicionamiento firmado por Emilio Apud, Julio César Araoz, Alberto Enrique Devoto, Alieto Guadagni, Jorge Lapeña, Daniel Montamat y Raúl Olocco, los exsecretarios de Energía de la Nación advirtieron que si bien “en líneas generales el proyecto procura discriminar positivamente al sector de hidrocarburos respecto a otros sectores en un contexto de inestabilidad macroeconómica y estancamiento productivo que afecta todas las inversiones en capital fijo, aumentando la tasa de descuento de los distintos proyectos, y cercenando el acceso al financiamiento. Establece un régimen fiscal, regulatorio, cambiario y económico ad hoc por 20 años, y deja amplios espacios de discrecionalidad y decisión para la autoridad de aplicación de la ley”.
Además sostuvieron que “la promoción no forma parte de una estrategia energética nacional acordada y consensuada por vía parlamentaria que defina una auténtica “Política de Estado para el Sector Energético”.
Los ejes centrales del rechazo que los exfuncionarios solicitaron al Congreso se deben a cuatro puntos. El primero es que los exsecretarios consideran que “el proyecto es extemporáneo e inoportuno por ignorar las condiciones previas de contexto internacional de transición energética, y las condiciones locales de inestabilidad macroeconómica e indefinición del rumbo productivo y energético”.
En segundo lugar, plantearon que la iniciativa “tampoco forma parte de una Estrategia Energética nacional y de un Plan Energético de largo plazo acordado por ley del Congreso de la Nación”.
Como tercer eje detallaron que el proyecto “intenta consolidar un régimen de promoción a la actividad petrolera y de toda su cadena de valor con una duración de 20 años que compromete recursos fiscales indeterminados que el Estado no posee y que, además, no están cuantificados”.
Además señalaron que “compromete un régimen de estabilidad fiscal por el plazo de la promoción introduciendo modificaciones tributarias que podrían ir en contra de los compromisos e intereses internacionales de Argentina en la lucha contra el cambio climático. Por ejemplo, la fijación de una alícuota muy baja de impuesto a las emisiones de carbono”.
Y por último advirtieron que “el proyecto no va a ser convocante de las ingentes inversiones privadas (nacionales e internacionales) que la Argentina necesita para desarrollar intensivamente sus recursos remanentes de petróleo y gas en la ventana de oportunidad que abre la transición energética antes de que sea tarde”.
FUENTE: Río Negro